Sabiduría y folklore
Sabiduría y folklore
Folklore -o folclore- proviene del inglés folk (gente, pueblo) lore
(ciencia, saber, aprender). Tiene que ver con el conocimiento acerca de
costumbres, artesanías, canciones, cuentos, leyendas, etc. que viene por
tradición, es decir, de generación en generación.
Entonces, lo que nosotros llamamos
“folklore” muchas veces no lo es, por ejemplo: una canción nueva, recién
compuesta, recién grabada… De todas maneras, como está compuesta más o menos
siguiendo unos ritmos y unas características musicales que sí son tradicionales,
se lo llama, por extensión, “folklore” o
“folclore”. A veces sucede que algunas de estas canciones terminan siendo tan
populares que son transmitidas también de padres a hijos, generación tras
generación, mereciendo aún más que se las llame “folklóricas”.
Uno de los grandes compositores de
lo que llamamos folklore argentino es Ariel
Ramírez (1921-2010), entre sus numerosas composiciones se destaca la “Misa criolla”.
“¿Y eso qué viene a ser?”
Misa. La palabra proviene de “Ite, missa est”, del final de la
celebración, algo así como “marchaos, (la plegaria, la víctima) ha sido
enviada”
Hemos escuchado que la Misa es un encuentro, una fiesta, un sacrificio…
¿qué es entonces? La Misa nos pone frente a una realidad sobrenatural, esto quiere
decir que está por sobre lo que alcanzamos a ver con nuestros ojos, que está
por sobre lo que alcanzamos a ver con la luz natural de la razón…
La Fe nos hace ver más allá de la
razón, sin contradecir la razón. Pensemos que si, en vez de seres humanos,
fuéramos puntitos que viven en una hoja de papel, nuestro mundo sería un mundo
de dos dimensiones… ¿qué pasaría si alguien en ese mundo nos explicara que
existe un mundo en tres dimensiones (que existen “cosas” como cubos, esferas, o seres que caminan, que pueden
tomar una esfera con algo que se llama “manos”, o golpear la esfera con algo
que se llama “pie” para que pase luego entre tres cilindros y que acabe en algo
que se llama “red” y que entonces esos seres corran como locos gritando “gol”)?
Como puntitos que viven en una hoja de papel nos costaría muchísimo entenderlo,
y lo que logremos entender será solamente haciéndonos una idea pero sin poderlo
comprobar con la pobre forma de ver que tenemos en nuestro mundo de papel de
dos dimensiones. Algo así nos sucede con lo sobrenatural, es una realidad que
nos sobrepasa.
En el Antiguo Testamento vemos que el pueblo judío ofrecía sacrificios
por sus pecados, es decir, mataban un animalito y se lo ofrecían a Dios. Eso
cambió con la venida de Cristo.
Podríamos decir que el mal y el bien son como dos atmósferas en
movimiento y que tienen peso (como si fueran dos masas de agua de distinto
color en una pileta de natación). Podemos ver en nuestra vida que esas
atmósferas no son algo fijo, están en movimiento.
Por ejemplo, un
amigo viene y me insulta. Eso es un
mal (una persona ha sido insultada
por su amigo). Sería bastante entendible que yo me enojara y lo insultase
también, pero así habré duplicado el
mal (dos amigos se han insultado). En
cambio, si yo logro encausar mi enojo en el dolor de haber sido insultado
injustamente, y, en vez de devolver el insulto, trato de indagar por qué mi
amigo ha venido de esa manera… es posible que mi amigo se dé cuenta de que
estuvo mal, se disculpe sinceramente y termine todo bien (aunque, ciertamente,
fue un sufrimiento para mí)… en ese caso el mal se ha desvanecido, fue
absorbido por mi actitud. Y si mi amigo no se disculpa, al menos no habré
duplicado el mal, no lo habré extendido.
La muerte de Cristo en la cruz absorbe el peso del mal en el mundo, no
solo del mal hasta ese momento sino el mal de toda la historia hasta el fin de
los tiempos. Él se ha ofrecido en sacrificio como Cordero inocente, en la
Última Cena, en la Cruz, y en cada Misa que se celebra. Es decir, la Misa no es
un mero recuerdo de algo que sucedió, ni es una representación… es el mismo
sacrificio de Cristo en el que participamos.
La película “La Pasión de Cristo”
(que es difícil de ver, porque es como si estuviéramos en las calles de Jerusalén
viendo lo que sucedió) ilustra ese hecho, por una parte porque muestra las
imágenes de la Última Cena intercaladas
con las imágenes de la Crucifixión y
por otra, porque su estreno en el año 2004 produjo un revuelo en los medios que
mostraban enojos y discusiones de personas no creyentes sobre asuntos sucedidos
hace dos mil años. ¿Por qué esta película ha producido eso si dice lo mismo que
estuvo siempre en los evangelios? Tal vez por eso mismo y, además, porque el
hecho sigue siendo actual, sigue
siendo algo presente.
La muy especial presencia maternal de la Santísima Virgen María, los
ángeles, los santos… todos se hacen presentes. Una multitud de ángeles rodea la
iglesia y cubre los fieles impidiendo la aproximación de los demonios. Una lluvia
de gracias cae sobre el Purgatorio, donde hay almas purificándose para poder entrar
al Cielo y, después, algunas de ellas son recibidas en el Cielo con enorme
alegría luego de la Consagración. Es decir, la Iglesia del Cielo, del
Purgatorio y de la Tierra se reúnen en la celebración. Gran alegría, belleza y
música maravillosa. (Tomado de una revelación que tuvo un sacerdote sobre la
Misa, el padre Johann Baptist Reus (o João Batista Reus) (1868-21—1947))
Esta obra de Ariel Ramirez,
la “Misa Criolla”, entonces, no es
sobre un hecho histórico más o menos importante, sino sobre algo central, tan
central que divide la historia en dos, tan central que concierne a todos los
seres humanos.
¿Y qué es eso de “criolla”? Cuando se dice que algo
es “criollo” significa que es característico de la cultura o de la tradición de
un país hispanoamericano.
¿Pero por qué se le llama “Misa” a una composición musical? Las
primeras composiciones musicales llamadas “Misas” surgen de la tradición del canto gregoriano (se cantaba sin acompañamiento instrumental,
a una sola voz, es decir todos cantaban la misma melodía), que es la
música principal de la Iglesia. Posteriormente, en los siglos XIII y XIV, la
composición de Misas utiliza el estilo polifónico
(a varias voces, o sea melodías superpuestas), que es la segunda en importancia
de las músicas usadas en la Iglesia.
La forma musical “Misa” viene dada
por la liturgia y está integrada por piezas (“canciones”), hay dos categorías:
el Propio y el Ordinario. El Propio son
las partes variables, es decir, que pueden variar de acuerdo a la festividad
que se celebre. El Ordinario (a veces usamos esa palabra para decir
que algo es de baja calidad, pero quiere decir “común”, “de todos los días”)
se llama así porque las piezas que lo componen están (o estaban) en casi todas
las Misas. El Ordinario está
integrado por las siguientes piezas (“canciones”): Kirie (Señor),
Gloria, Credo, Sanctus-Benedictus, Agnus Dei (Cordero de Dios).
Entonces, cuando un músico decide
componer una “Misa” ya tiene los títulos de las “canciones” y tiene también las
letras.
La Misa Criolla de Ariel
Ramirez está integrada, entonces, por cinco piezas (“canciones”) que llevan
los nombres recién mencionados. El carácter “criollo” de esta obra viene dado
por los ritmos que utiliza, que son tradicionales de Argentina.
Misa
Criolla - Ariel Ramírez (1964)
En este video están las cinco “canciones”.
La letra no está en el video sino en este escrito. Al lado de cada título está el minuto y segundo en el que empieza.
Kyrie (vidala-baguala) 0:16
Señor, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros
(Ten piedad, Señor ten piedad de nosotros)
Cristo, ten piedad de nosotros
(Ten piedad..........piedad)
Cristo, ten piedad de nosotros
(Ten piedad..........piedad)
Cristo, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros
Señor, ten piedad de nosotros
(Ten piedad, Señor ten piedad de nosotros)
Gloria
(carnavalito-yaraví) 3:55
Gloria a Dios
En las alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Gloria a Dios
En las alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Te alabamos
Te bendecimos
Te adoramos
Glorificamos
Te alabamos
Te bendecimos
Te adoramos
Glorificamos
Te damos gracias / te damos gracias
Por tu inmensa gloria
Gloria a Dios
En la alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Gloria a Dios
En la alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Te alabamos
Te bendecimos
Te adoramos
Glorificamos
Te alabamos
Te bendecimos
Te adoramos
Glorificamos
Te damos gracias / te damos gracias
Por tu inmensa gloria
Señor Dios Rey Celestial
Dios Padre todopoderoso
Señor Hijo Único, Jesucristo
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre
Tú que quitas los pecados del mundo
Ten piedad de nosotros
Tú que quitas los pecados del mundo, atiende nuestras súplicas
Tú que reinas con el Padre, ten piedad de nosotros
De nosotros
Gloria a Dios
En la alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Gloria a Dios
En la alturas
Y en la tierra
Paz a los hombres
Paz a los hombres / paz a los hombres que ama el Señor
Porque Tú solo eres Santo. Solo Tú Señor Tú solo
Porque Tú solo eres Santo. Solo Tú Señor Tú solo
Tú solo Altísimo Jesucristo
Con el Espíritu Santo
En la gloria de Dios Padre
Amén
Credo
(chacarera trunca) 10:15
Padre todopoderoso, creador de cielo y tierra
Creo en Dios
Padre todopoderoso creador de cielo y tierra
Y en Jesucristo creo
(su Único Hijo, nuestro Señor
Fue concebido por obra y gracia
Del Espíritu Santo
Del Espíritu Santo)
Nació de Santa María de Santa María Virgen
Padeció bajo el poder, poder de Poncio Pilato
Fue crucificado, muerto y sepultado
(Descendió a los infiernos, descendió a los infiernos
Descendió a los infiernos, descendió a los infiernos
Al tercer día
(al tercer día)
Resucitó
(resucitó, resucitó de entre los muertos)
Subió a los cielos
Subió a los cielos
(Subió a los cielos)
Está sentado a la diestra de Dios
(Padre todopoderoso...
Desde allí ha de venir
A juzgar vivos y muertos
Desde allí ha de venir
A juzgar vivos y muertos)
Creo en el Espíritu Santo
(Santa Iglesia Católica)
La comunión de los santos
Y el perdón de los pecados
(Resurrección de la carne
Y la vida perdurable)
Amén, amén, amén, amén
Sanctus
(carnaval cochabambino) 14:00
Santo, Santo, Santo
Señor Dios del universo
Santo, Santo, Santo
Señor Dios del universo
Llenos están los cielos
Y la tierra de tu gloria
Llenos están los cielos
Y la tierra de tu gloria
Hosanna en las alturas
(Bendito el que viene
En el nombre del Señor)
Hosanna en las alturas
Agnus Dei
(estilo pampeano sureño) 16:28
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, ten compasión de
nosotros
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, ten compasión de nosotros
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, danos la paz
El carácter de la obra: podríamos decir que su carácter artístico queda especialmente acentuado cuando se interpreta en un teatro o en cualquier lugar donde la gente se ubique para ver los cantantes y escuchar la música. El carácter religioso viene dado por seguir la forma musical “Misa”. Si bien los ritmos utilizados no provienen de la liturgia sino, precisamente, del folklore de Sudamérica, el compositor ha elegido los ritmos de acuerdo a lo que las letras expresan, por ejemplo, un ritmo muy alegre, como el carnavalito, para el Gloria, y un ritmo muy distinto para el Kirie o el Agnus Dei donde se pide perdón a Dios por nuestros pecados.
Para terminar con la clase de hoy, otra música:
Tiempos
festivos
Es una “canción” instrumental que tiene que ver con
el tiempo de la niñez. Las pinturas que ilustran son del pintor norteamericano
Donald Zolan (1937-2009). “Las pinturas
de Donald Zolan captan ese universo nuevo que hay en la mente de cada niño”. La
imagen final, donde la música se oscurece un poco y se ve un juguete (una
muñeca) algo abandonada en una biblioteca tiene que ver con que los “tiempos
festivos” de la niñez pasan y vienen otros tiempos con otras ocupaciones y
obligaciones…
“La mente del niño no es incorruptible,
cada adulto que camina por esta tierra es una muestra de ello… La naturaleza es
maravillosa, pero está dañada desde el amanecer del tiempo... Sin embargo, la
niñez está ahí, como un faro, señalándonos que la bondad es posible…”